jueves, 14 de junio de 2012

Nuevas monedas reducirán costos hasta $15.000 millones

Convivirán hasta 20 años con monedas actuales. Billete de 1.000 pesos se imprime hasta fin de año. En los próximos dos meses, el Banco de la República pondrá a circular algo más de 305 millones de piezas de las nuevas monedas, que valdrán 100.000 millones de pesos. 

Además, las nuevas monedas convivirán con las actuales 15 o, incluso, 20 años, tiempo promedio de vida útil de una moneda. Desde hoy salen a la calle las nuevas monedas de 50 y 500 pesos; las de 100 y 200 pesos lo harán a partir de julio próximo y las de 1.000 pesos entrarán a circular en agosto. 

Con las nuevas piezas, el Banco de la República espera ahorrar cada año unos 15.000 millones de pesos (un 33 por ciento del costo actual), pues el costo de producción de las monedas actuales alcanza los 46.000 millones de pesos. 

El gerente del Emisor, José Darío Uribe, dijo que el diseño, cuyo elemento común en las cinco nuevas denominaciones es el agua, fue encargado a los artistas Johann Calle y José Antonio Suárez. Una de las mayores novedades es la moneda de 1.000 pesos, de las cuales se producirán 45 millones de unidades. 

En una de sus caras (anverso) estará impresa la tortuga caguama, especie en vía de extinción, y en el reverso (sello), además de unas líneas onduladas, la frase ‘cuidar el agua’ repetida cuatro veces, así como la denominación de la pieza. 

Esta moneda reemplazará al actual billete de 1.000 pesos, cuya producción irá hasta finales de año. El tiempo de vida del papel moneda se calcula en máximo 12 meses, por lo que dicho billete podría circular solo hasta el 2014. 

Uribe explicó que por cada billete en circulación hay tres monedas, por lo cual se estima que hoy existen unos 3.900 millones de piezas metálicas. La guacamaya bandera, el frailejón y el oso de anteojos estarán impresos en el anverso (cara) de las monedas de 200, 100 y 50 pesos. La rana de cristal será la imagen de la cara de la moneda de 500 pesos. 

De las monedas de 50 se producirán 45,5 millones de piezas; de las de 100 se elaborarán 78,7 millones; de las de 200, aproximadamente 80 millones y de las de 500, otros 56 millones de unidades. 

DISEÑOS CON MÁS ELEMENTOS DE SEGURIDAD 
Las imágenes en multinivel, para el caso de las monedas de 1.000 y de 500 pesos, que combinan dos metales y relieves en ambas aleaciones, son algunas de las características de seguridad de la familia de nuevas monedas que comienzan a circular. 

Las piezas de 1.000, además, incluyen un canal en el borde y una imagen que, según el ángulo de visión, cambia la palabra ‘MIL’ por ‘BRC’, iniciales del Banco de la República de Colombia. Según estadísticas del banco Emisor, en el país circulan hoy unas 18 monedas falsas por cada millón de las originales. 

LÍOS CON MÁQUINAS DISPENSADORAS 
Al menos unas 10.000 dispensadoras de pasabocas y bebidas, 30.000 de dulces y otro número importante de máquinas para parqueo, juegos de azar, teléfonos públicos y contadoras de monedas deben ajustarse ante la llegada de las nuevas monedas que comienzan a circular. 

Según el gerente de Autosnacks, Andrés Rodríguez, si la llegada de esas monedas los obliga a cambiar los monederos de las máquinas, los costos que tendría que asumir su empresa rondarían los 4 millones de dólares. 

Esta firma maneja unos 4.000 dispensadores, cuya tecnología viene de España, Italia, Estados Unidos y Canadá, a donde deben remitirse las monedas para hacer los ajustes necesarios. 

Rodríguez dijo que, en el mejor de los casos, los costos serían de unos 350 millones de pesos, si solo se requiere ajustar el software de los equipos para que acepten las nuevas denominaciones, valor que no se trasladará al usuario final de los equipos. 

Los propietarios de las máquinas habían solicitado desde febrero al Banco de la República modelos de las monedas para ir adecuando los dispensadores, pero solo hasta ahora podrán tener acceso a estas, por lo que el cambio podría tardar mes y medio.

Fuente: Portafolio.co

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